DEL AMOR Y OTRAS LUNAS

   Y a estas horas de la madrugada, vuelvo a tí con desesperación y desvelo. Porque es así como se ama, sin tranquilidad, sin pensar en uno mismo. Sin noción del tiempo ni del espacio. Con el corazón bombeando a mil revoluciones por minuto. Así, sin más. Sin más complicación que la de saber que estás ahí, que siempre lo estarás. Velando mi sueño y acompañando mi luna, que es tuya. Odiando a los dioses que niegan mi Olimpo al que quiero volver siempre, condenándome de por vida al Infierno.

   Una madrugada, y otra, y otra más. Hasta que el cuerpo diga 'basta' y el corazón diga 'dáme descanso'. Pero no tengo prisa. Las madrugadas no se miden con el reloj. No las marca el tiempo sino el espíritu. Por eso las mías serán eternas y tendrán nombre. Son francas y sinceras, que parece lo mismo pero no lo es. Jamás fueron embusteras porque la cabeza puede mentir, pero el alma no.

   Trocitos de cielo en cada madrugada, que se guardan como un tesoro. El único peaje que llevaré cuando tenga que cruzar la Estigia.

   Por eso mis madrugadas son eternas y sagradas. Sola, frente al espejo de mi alma, no caben los errores ni las mentiras."Lo que sientes es lo que hay", me dice el reflejo. Ni más ni menos. O lo tomas o lo dejas. "Tus madrugadas tienen dueño, aunque sean tuyas".

   Porque no somos dueños de nosotros mismos. SOMOS porque otros desean que seamos. Nuestr existencia tiene sentido, porque lo tiene para otros. Somos importantes porque somos la razón de existir de alguien.

   Por eso mis madrugadas son y serán siempre. A pesar de las ausencias y de los silencios, del tabaco y el café. Llenas de cuevas, de corazones pintados en los árboles, de peñas de enamorados, de trocitos de cielo y de lunas blancas.

   Sin más.

Comentarios

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  2. En las madrugadas solo existe el corazón, la cabeza solo sirve para expresar lo que dicta el corazón

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